Orden de Sucot

B"H

INTRODUCCIÓN

Nos enseñan nuestros sabios que el Noájida no tiene la obligación hoy de hacer una sucá (cabaña), sin embargo, se le recomienda que él la haga, debido a que cuando el Tercer Templo sea reconstruido  todas las naciones junto con el pueblo de Israel, tendrán que estar allí presentes en la festividad de Sucot, que simboliza la alegría de que Él bendito es siempre está con nosotros y nos provee de todo, por lo que en estos siete día se nos demanda ser felices.

¿Cómo podemos lograr ser feliz? Esto lo conseguiremos a través de construir una cabaña donde se adecua como si fuese una casa, con todo lo necesario para poder comer y beber allí, para que podamos ver que no es necesario todo lo que tenemos en casa, tan sólo con poco podemos ser felices y ser agradecidos con HaShem por todo lo que nos ha dado, desprendernos de todo aquello que nos frustra, nos distrae y nos quita nuestra libertad, puede ser llamado: trabajo, cuentas, compromisos, modas, sociedad, que nos genera mucho estrés y provoca competencia y sentir esa insatisfacción, siempre se considera que nos hace falta algo más.

Esto es así, porque al entrar en la Sucá, que es una casa temporaria se nos recuerda que así también son nuestros años de vida, sólo estamos de paso en este mundo, y es una invitación a despertar la conciencia de lo que venimos a hacer en este mundo. Entendemos que lo más valioso que tenemos es la vida y el hecho de poder apegarnos a nuestro Creador a partir de cumplir los preceptos y al ver que en esa habitación temporaria, tenemos todos lo necesario para cumplir con nuestra misión, es allí donde podemos conectarnos con ese grado de alegría y gratitud de que allí sin necesidad de todo a lo que estamos acostumbrados en casa, nos sentimos completos y entonces vemos el potencial para poder llegar a las alturas más elevadas, experimentamos el hecho de ser felices, porque tenemos todo lo que se necesita: "la vida". Y es aquí donde podemos valorar cada cosa que nuestro amado Padre nos da, cantamos y danzamos de ver:"Cuan bueno es HaShem".

La festividad de Sucot también es mencionada como "la festividad de la cosecha" y el "tiempo de nuestro regocijo",  de manera que es una ordenanza de nuestro Padre que nosotros nos regocijemos hayamos tenido buena o no buena cosecha (a nuestros ojos), de tal forma que se nos enseña a estar contentos con lo que tenemos porque ello es lo que necesitamos, así es como vemos, que Sucot es una fiesta cuyo poder es que podamos ser agradecidos con HaShem, ya que Él provee de todo sea grande o pequeño con una supervisión sin igual, para que podamos desarrollar nuestro potencial.

LOS USHPIZIN (LOS INVITADOS)

En estos días llegan Siete Invitados para cenar con los Yehudim (Judíos) y el Noájida medita en ello, estos invitados son los Siete pastores de Israel: El Patriarca Abraham, el Patriarca Itzjak, el Patriarca Yaakov, Nuestro Maestro Moshé, el Kohen Aharón, El Justo Yosef y El Rey David. Donde cada uno tiene una conexión especial con las siete sefirot inferiores: Jésed, Guevurá, Tiferet, Nétzaj, Hod, Yesod y Maljut.

Primer Día de Sucot

En este día se puede contar o leer sobre el Patriarca de Israel Abraham quien simboliza el Jésed (la bondad). Seguir su ejemplo nos da la fuerza para poder desarrollar el amor que es preservar a los demás o encontrar virtud en los demás. Abraham nos enseña a preservar sin importar si se es merecedor o no. Hacer esto es cumplir con la Ley Divina, y hacer esto implica: No Tener Relaciones Sexuales Ilícitas.

En  este día se puede estudiar sobre la ley de No Inmoralidad Sexual. Y se recomienda leer el libro de Tehilim del Salmo 1 al 29.

Segunda Día de Sucot

En este día se puede contar o leer sobre el Patriarca de Israel Itzjak quien simboliza la Guevurá (el rigor). Seguir su ejemplo nos da la fuerza para poder desarrollar el temor de D-s que es ser conscientes de la vida, es decir, conocer el propósito de esta, servir a HaShem. Itzjak nos enseña a tener temor de D-s, es decir, a no perder el tiempo, sino más bien ser consciente de que este es corto. De manera, que al entender ello, empezamos a cumplir la ley de: No Asesinar.

En  este día se puede estudiar sobre la ley de No Asesinar. Y se recomienda leer el libro de Tehilim del Salmo 30 al 50.

Tercer Día de Sucot

En este día se puede contar o leer sobre el Patriarca de Israel Yaakov quien simboliza el Tiferet (el equilibrio, la belleza o armonia). Seguir su ejemplo nos da la fuerza para poder desarrollar la misericordia, que es dar a cada uno lo que necesita o aceptar que todos tenemos lo que necesitamos, es decir, debemos actuar en  equilibrio con la bondad y el rigor. Yaakov nos enseña a ser misericordiosos, es decir, a dar en la medida correcta, respetando que HaShem controla y dirige todo. De manera, que al entender ello, empezamos a cumplir la ley de: No Robar.

En  este día se puede estudiar sobre la ley de No Robar. Y se recomienda leer el libro de Tehilim del Salmo 51 al 72.

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Cuarto Día de Sucot

En este día se puede contar o leer sobre Moshé nuestro maestro quien simboliza Nétzaj (victoria). Seguir su ejemplo nos da la fuerza para poder desarrollar la confianza en HaShem, que es saber que HaShem es quien dirige todo en nuestras vidas, nos despierta a ver que Él es quien se encuentra atrás de la naturaleza. Moshé nos enseña que HaShem es quien provee en todo momento. De manera, que al entender ello, empezamos a cumplir la ley de: No Idolatrar.

En  este día se puede estudiar sobre la ley de No Idolatrar. Y se recomienda leer el libro de Tehilim del Salmo 73 al 89.

Quinto Día de Sucot

En este día se puede contar o leer sobre Aharón el Sacerdote quien simboliza a Hod (esplendor). Seguir su ejemplo nos da la fuerza para poder desarrollar la sinceridad, que es saber que HaShem es quien en todo momento esta proveyendo a cada uno de acuerdo a lo que necesita para poder desarrollarse, despertando en cada uno de nosotros la gratitud. Aharón nos enseña que HaShem a cada uno le ha dado una misión y las herramientas adecuadas para ser quien debe ser. De manera, que al entender ello, empezamos a cumplir la ley de: No Blasfemar.

En  este día se puede estudiar sobre la ley de No Blasfemar. Y se recomienda leer el libro de Tehilim del Salmo 90 al 106.

Sexto Día de Sucot

En este día se puede contar o leer sobre Yosef el Justo quien simboliza a Yesod (fundamento). Seguir su ejemplo nos da la fuerza para poder desarrollar la verdad, que es saber que HaShem es quien crea situaciones en nuestra vida para poder sacar nuestro potencial, despertando en cada uno el coraje de elegir la vida en todo momento. Yosef nos enseña que HaShem a cada persona le crea pruebas que le ayudará a cumplir con su misión. De manera, que al entender ello, empezamos a cumplir la ley de: No Comer Miembro de Animal con Vida o No Ser Cruel con los Animales.

En  este día se puede estudiar sobre la ley de No Comer Miembro de Animal con Vida. Y se recomienda leer el libro de Tehilim del Salmo 107 al 119.

Séptimo Día de Sucot

En este día se puede contar o leer sobre el Rey David quien simboliza a Maljut (reinado). Seguir su ejemplo nos da la fuerza para poder desarrollar la humildad, que es saber que HaShem a cada uno de nosotros nos creo con un propósito, de manera que todos somos importantes, pero no superiores a los demás. De manera, que al entender ello, empezamos a cumplir la ley de: Establecer Leyes y Cortes de Justicia.

En  este día se puede estudiar sobre Establecer Leyes y Cortes de Justicia. Y se recomienda leer el libro de Tehilim del Salmo 120 al 150.

LAS CUATRO ESPECIES

De las cuatro especies que usa el Yehudí (Judío) en el ritual de Sucot, el etrog (citríco) tiene tanto gusto como fragancia, el hadas (mirto) tiene fragancia pero no gusto, el lulav (palmera) produce fruto el cual tiene gusto pero no fragancia, y la aravá (rama de sauce) no tiene ni gustoni fragancia. Las cuatro especies deben ser tomadas juntas, y la ausencia de cualquiera hace que el precepto este incompleto (Midrash).

Este precepto que cumple el Yehudí (judío) debe hacer reflexionar en los siguiente: frecuentemente se valora a las personas ya sea en virtud de su carácter, conocimiento, riqueza o estatus social. Entonces viene este precepto a recordarnos que ante D-s somos todos iguales. De manera que el precepto de las cuatro especies, está incompleto si falta una especie, de manera que sin importar a que tipo de especie nos asemejemos no estamos completos si no estamos unidos, ligados con lazos de compasión y afecto, y es así como podemos tener santidad. Si rechazamos a una persona porque no la consideramos digna, con eso estamos disminuyendo nuestro propio valor también. En conclusión: si todos estamos unidos, somos todo, si rechazamos a alguno de nosotros no somos nada.

Fuente: Rabino Eliahu Kitov, Rabino Abraham Twersky y Rabino Yechiel